Por un Larp más feminista
La mujer en el mundo del Larp tiene su sitio y está más que ganado. Hace muchos años la media de hombres estaba muy por encima de las mujeres pero hoy en día, no existe diferencia alguna.
#LarpLikeaGirl
Desde la damisela en apuros hasta la guerrera más fiera que conoce el mundo, no hay un estereotipo para la mujer en este mundo, y nunca existirán. Cualquier persona es libre de crear el personaje que quiera, a su gusto, sin que nadie le diga qué debe hacer. Y ahí está la magia del rol en vivo. No importa quién seas en la vida real, sino el personaje que has decidido interpretar. Aquí las tornas del estereotipo se rompen, es la guerrera de brillante armadura quien salva al príncipe del temible dragón. ¿Tienes una capitana gritándote y dándote órdenes? Nadie va a notar nada raro, ni fuera de lo común. Afortunadamente, en este mundo, no existe distinción alguna, solo tu capacidad de interpretar, y el personaje que lleves, el cual has elegido con total libertad. Un ejemplo de esto es el movimiento que salió durante el 8M #LarpLikeaGirl donde se volvió a comprobar que la comunidad de Larp debe dar las gracias por tener un bloque femenino tan grande y con tanta calidad.
La lucha por la igualdad dentro del juego
Como hemos comentado anteriormente, en muchos roles en vivo podemos ver a la mujer asumiendo cargos o personajes que antiguamente ni se pensaba en ello, pero ¿Y cuándo nos enfrentamos a un rol en vivo de carácter histórico? ¿Debemos romper esa barrera que existía en la antigüedad aunque eso implique romper la historicidad del vivo? Es cierto que siempre que juguemos en la Edad Media la mujer va a tener un papel secundario si nos ceñimos al rigor histórico, pero, ¿Debe seguir eso así? No creo que pase nada porque una mujer asuma un papel que históricamente sería de un hombre, no va a romper el juego ni mucho menos la experiencia. El personaje seguirá siendo ese personaje, independientemente de su género y de quién lo interprete. Rompiendo ese estereotipo mostramos que no hubiese pasado nada si la mujer hubiera tenido esos cargos en la antigüedad y por ende, ahora tampoco. Quizás sea una forma de mostrar, una vez más, que la mujer no está por debajo de nada ni de nadie, que hay que mirarse de tú a tú independientemente de quién seas, al final, todo depende del personaje ¿no? Aún así, no hay que caer en el error de diferenciar el juego de la realidad.
Una comunidad femenina más grande
La lucha ha sido larga, y aún queda por mejorar, pero cada vez la situación es mejor. Existe más igualdad, se rompen los estereotipos y se demuestra que no pasa nada por romper el molde impuesto, creamos uno mejor, más grande y feminista.